10 datos sobre los osos polares

1. No son realmente blancos

Los osos polares tienen la piel negra (mira su nariz) y está cubierta de pelo transparente, libre de pigmentos. Cada cabello dispersa y refleja la luz visible, esto hace que parezcan de color blanco, aunque no lo son.

2. Tienen una mordida más fuerte que el gran tiburón blanco

En 86.83 kilogramos-fuerza (Kgf) por centímetro cuadrado, los osos polares tienen una mordida más fuerte que el gran tiburón blanco, el tigre de Bengala y el león africano.

Para poner ese número aún más en perspectiva, la fuerza promedio de una mordida humana es – da un poco de vergüenza – de 11.39 kilogramos-fuerza (Kgf) por centímetro cuadrado.

 

 

3. Pueden comunicarse utilizando solo sus pies

A cada paso que da un oso polar sus patas dejan tras de sí un rastro químico perfumado. Esto permite que se comuniquen a través de extensos territorios. ¡Nuestros pies son tan aburridos!

4. Son capaces de correr tan rápido como los caballos

Un oso polar alcanza una velocidad máxima de 40 km por hora. Sin dudas, podría hacerle una gran competencia a un caballo galopando.

 

 

5.  Son invisibles para los visores de visión nocturna

Una capa gruesa de grasa y su icónico pelaje mantienen calientes a los osos polares en las heladas superficies árticas. Aíslan tan bien el calor que son casi invisibles en visión infrarroja.

6. Los osos polares tienen tres párpados

Así es – ¡tres! Su tercer párpado reduce la cantidad de radiación ultravioleta que entra en sus ojos. De esta manera, se protegen de la ceguera de la nieve (una pérdida temporal de la visión causada por el brillo de la luz reflejada por grandes superficies de nieve o hielo). Esta función es bastante útil para los osos polares si tenemos en cuenta el lugar donde viven.

7. No necesitan beber agua

Es un dato obvio: la mayor parte del agua dulce en el Ártico está congelada. Para ti y para mí esto podría causar algunos problemas, pero no para los osos polares. Ellos han evolucionado de tal forma que ya no tienen que beber agua, pueden obtener todo el H2O que necesitan de la reacción química que descompone la grasa almacenada en su cuerpo.

 

 

8. No se mojan

Los osos polares tienen dos capas de piel. Los pelos exteriores forman una capa que protege a la piel interior de mojarse cuando están en el océano. Después de un baño, ellos solo necesitan darse una sacudida rápida y están listos para continuar con su día.

9. Tienen la lengua azul

 

 

10. Un oso polar una vez nadó durante nueve días consecutivos

El nado más largo que pudo registrarse de un oso polar es de 687 kilómetros durante nueve días consecutivos (son 232 horas sin parar, si te lo estás preguntando).

Escalómetro

ALV - ARCÁNGEL, GRUPO FRONTERA
1
OJO POR OJO - ALICIA VILLARREAL
2
COMO EN OS VIEJOS TIEMPOS - EDEN MUÑOZ
3
EL EXITOSO - EL FANTASMA
4
AQUÍ LO SIENTO - CAMILA FERNÁNDEZ
5